Taller de escritura:
Coordina: Ariel Dilon
Suele identificarse el suspenso con un género, ejemplificado por la novela policial y el thriller. Pero si el suspenso es la cuerda –el interés del lector– que, sin que llegue a cortarse, hay que mantener lo más tensa posible, un análisis más riguroso revelará que esa cuerda atraviesa todo relato (y en cierto modo, todo discurso) y no sólo los ejemplares del género suspense. Sólo una buena administración del discurso –a menudo intuitiva, como lo demuestran tantos contadores de chistes y narradores orales– es capaz de mantener vivo el interés del receptor. Se trata de formular preguntas, a menudo tácitas, y de demorar sus respuestas, estirando la “cuerda” a veces hasta el límite de su resistencia. ¿Qué va a suceder ahora? es la pregunta crucial, que se desdobla en numerosas preguntas incidentales, a las que se irá dando respuestas parciales, como en una larga negociación, mediante los sucesivos eventos narrados. Graduadas decepciones de la expectativa, vicarias satisfacciones de la curiosidad y del sentimiento de empatía generados en el receptor, cada respuesta abrirá nuevas preguntas, nuevas versiones de la pregunta.
El marco teórico es el que brinda, en primer lugar, la elucidación que hace David Lodge del suspenso, deliberadamente por fuera del género clásico suspense, así como de subgéneros como el thriller (que es, en esencia, un suspenso a repetición, una ametralladora de preguntas de respuesta postergada, que combina el suspenso y la aventura). Lodge toma el caso clásico de A Pair of blue Eyes (Un par de ojos azules, 1873), novela de Thomas Hardy que contiene una escena de suspenso paradigmático, momento cliffhanger por antonomasia, pues el protagonista pende literalmente de un acantilado, sujeto apenas por una mata de hierba, y la pregunta inevitable –¿caerá hacia una muerte segura o será rescatado a tiempo?– demora más de 10 páginas en ser contestada, páginas durante las cuales la atención del lector está tan “colgada” de cada detalle como el propio protagonista.
También se visitarán las ideas / consejos de Patricia Highsmith, cultora no convencional del género, en su librito Suspense. Los ejemplos son incontables, y se invitará a los alumnos a añadir otros que ellos mismos identifiquen. Finalmente escribirán, a partir de consignas, textos que contengan ingredientes de suspenso en sentido amplio, y se terminará con la lectura y revisión crítica de los textos producidos, que serán analizados tanto desde el punto de vista del cumplimiento específico de la consigna como de su apreciación literaria general.
El taller se divide en tres etapas cuya duración es, orientativamente, de dos semanas:
1) Semanas 1 y 2: Construcción teórica / Ejemplos en la literatura, el cine, el teatro, la historieta, la noticia, la publicidad y otras formas de ficción como el chiste, el chisme, etc.
2) Semanas 3 y 4: Consignas de escritura / Producción de textos.
3) Semanas 5 y 6: Lectura de los textos producidos en el marco del taller / Debate crítico y cierre.
Duración: 6 encuentros de 2 horas
Días y horario de cursada: martes de 20 a 22 hs.
Inicio de clases: martes 7 de mayo
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